Cultivating a life of prayer

Cultivando una vida de oración

I want to leave you this week and next with a writing by Nathan Busenitz (professor of church history), about prayer that has ten reminders for Christians about the vital need to cultivate a life of personal prayer, as expressed by notable ministers of church history, and I pray that God will put a  burden on our hearts that will lead us to be men and women of prayer.

1. True effectiveness does not come through methods, but through prayer.

D. L. Moody: Those who have left the most profound impression on this land cursed by sin, have been men and women of prayer.

E.M. Bounds: What the Church needs today is not more machinery or better, not new organizations or more and no new methods, but men and women whom the Holy Spirit can use: people of prayer, powerful people in prayer.

2. A man's prayer life is indicative of the state of his walk with the Lord.

Charles  Spurgeon: I don't know of any better thermometer for your spiritual temperature than this, the measure of the intensity of your prayer.  

3.  Prayer is a vital means of sanctification.

J.C. Ryle: Prayer and sin will never live together in the same heart. Prayer will consume sin, or sin will drown prayer.

4. Negligence in prayer leads to vulnerability in temptation. 

John Owen: If we do not remain in prayer, we will remain in temptation. May this be an aspect of our daily intersession: "God, preserve my soul and guard my heart and all its ways so that I do not get entangled".  

When this is true in our lives, a passing temptation will not overcome us. We will remain free while others are in captivity.

5. Occupation is never a valid excuse for neglecting prayer.

R.A. Torrey: We are too busy to pray, and so we are to busy to have power. We have to much activity, but we accomplish little; many services but few conversions; lots of machinery but little results.

Quiero dejarles esta semana y la próxima con un escrito de Nathan Busenitz (profesor de historia de la iglesia), acerca de la oración que tiene  diez recordatorios para los cristianos sobre la necesidad vital de cultivar una vida de oración personal, según lo expresado por ministros notables de la historia de la iglesia, y oro para que Dios ponga una carga en nuestros corazones que nos lleve a ser hombres y mujeres de oración.

1. La verdadera efectividad no viene a través de métodos, sino a través de la oración.

D. L. Moody: Quienes han dejado la más profunda impresión en esta tierra maldita por el pecado han sido hombres y mujeres de oración.

E. M. Bounds: Lo que la Iglesia necesita hoy no es más maquinaria o mejor, no nuevas organizaciones o más y métodos novedosos, sino hombres y mujeres a quienes el Espíritu Santo puede usar: personas de oración, personas poderosas en oración.

2. La vida de oración de un hombre es indicativa del estado de su caminar con el Señor.

Charles Spurgeon: No conozco mejor termómetro para tu temperatura espiritual que éste, la medida de la intensidad de tu oración.

3. La oración es un medio vital de santificación.

J. C. Ryle: La oración y el pecado nunca vivirán juntos en el mismo corazón. La oración consumirá el pecado, o el pecado ahogará la oración.

4. La negligencia en la oración conduce a la vulnerabilidad en la tentación.

John Owen: Si no permanecemos en la oración, permaneceremos en la tentación. Que éste sea un aspecto de nuestra intercesión diaria: "Dios, preserva mi alma y guarda mi corazón y todos sus caminos para que no me enrede". 

Cuando ésto es cierto en nuestras vidas, una tentación pasajera no nos vencerá. Permaneceremos libres mientras que otros están en cautiverio.

5. La ocupación nunca es una excusa válida para descuidar la oración.

R. A. Torrey: Estamos demasiado ocupados para orar, y por eso estamos demasiado ocupados para tener poder. Tenemos mucha actividad, pero logramos poco; muchos servicios pero pocas conversiones; mucha maquinaria pero pocos resultados.